Las primeras impresiones no lo son todo, pero definitivamente son importantes. Cuando la videollamada de Zoom cobra vida, el guitarrista de Drain, Cody Chavez, saluda con un enérgico ‘What’s up, man?’ mientras su larga melena está recogida bajo una gorra de béisbol. El encuadre apenas capta los afilados bordes del logo de Metallica estampado en su camiseta sin mangas. Chavez tiene reputación de ser el tipo ‘metalero’ en una de las bandas más emocionantes del hardcore actual, y aquí está: el tipo metalero en una de las bandas más emocionantes del hardcore.
Esta dicotomía define gran parte del sonido y la personalidad de Drain, una banda que ha ayudado a llevar la escena hardcore de San Jose-Santa Cruz al plano internacional desde el éxito de su disco de 2020, California Cursed.
«Normalmente, la gente empieza como metalero y se convierte en un chico hardcore, o tal vez son un chico hardcore y pasan directamente a ser metaleros. ¿Por qué no puedes ser ambos?», reflexiona Chavez, y añade: «Muchos de mis guitarristas favoritos, como Michael Gibbons de Leeway o Sob de Merauder, eran chicos metal-hardcore. Tenían el pelo largo pero tocaban en bandas de hardcore. Así que pensé: ‘Bueno, si ellos pudieron hacerlo, ¿por qué yo no puedo?’”
La filosofía de Chavez es simple pero poderosa: ¿por qué no inyectar toda tu personalidad en la música? Esta mentalidad es evidente en la forma en que fusiona los elementos esenciales de ambos géneros. «Del hardcore, amo todas mis partes de groove y los breakdowns. Y luego, por supuesto, me encanta meter mis pequeños licks de thrash y mi influencia de glam metal, muchas cosas melódicas», explica. Este enfoque lo diferencia y aporta una capa de complejidad que a menudo falta en el hardcore más tradicional.
El álbum que lo captura todo: …Is your friend
En el tercer LP de Drain, …Is Your Friend (previsto para noviembre), Chavez logra esta fusión con una energía contundente. El disco presenta temas directos como Living In A Memory, adornados con armónicos de pellizco, mientras entrelaza leads galopantes y pegadizos entre los gritos crudos del vocalista Sammy Ciaramitaro. Este álbum se siente como la versión más completa de sí mismo como guitarrista, amplificando la complejidad sin perder la energía de ‘windmill’ (molino de viento) que caracteriza a su escena local.
La clave de su sonido es la autenticidad y la energía en vivo. «Somos un grupo de amigos divirtiéndose. La forma en que tocamos en una sala de ensayo es la misma forma en que tocamos para 2.000 personas. Realmente no hay mucha ciencia detrás», comenta Chavez. Sin embargo, detrás de esa aparente sencillez hay una dedicación incansable. Desde que las giras se reanudaron, Drain no ha parado, viendo cómo el tamaño de sus recintos aumenta constantemente. La química en el escenario es fundamental: Ciaramitaro con su energía punk, el baterista Tim Flegal marcando el ritmo, y Chavez desatando solos y riffs frenéticos.
Para la grabación, Drain recurrió a Jon Markson, quien también mezcló Living Proof de 2023. Markson, productor, ingeniero y bajista de Such Gold, se ha distinguido por hacer que las bandas punk suenen colosales sin pulir sus asperezas, aportando un peso genuino a los discos de Drug Church y One Step Closer. En este álbum, la colaboración con Chavez dio lugar a sonidos «sucios y febriles» que, al mismo tiempo, son detallados y orgánicos.
El tono y el equipo: de la vieja escuela a la modernidad
Chavez tenía un objetivo tonal muy específico para el nuevo álbum: «Buscaba tomar un tono de guitarra de metal de los 80 y modernizarlo». Para lograrlo, él y Markson emplearon una configuración de amplificadores inusual pero efectiva. «Utilizamos un Peavey Butcher, un Diezel Herbert 3, y luego, para conseguir esa textura brillante en el frente, usamos un Jazz Chorus. Fue algo realmente genial que no esperaba que sacara». El Peavey Butcher es conocido por su sonido grueso y agresivo similar al 5150, mientras que el Diezel Herbert 3 es un amplificador moderno de alta ganancia, lo que explica la capacidad de Drain para combinar lo clásico con lo contemporáneo.
En cuanto a las guitarras, Chavez es un fiel seguidor de Jackson. Utiliza su Dinky para la mayoría de los leads, y recurre a su Virtuoso para cualquier parte de down-picking. «Cada vez que tengo algo que requiere ‘chugging’, al estilo Hetfield, uso ese», dice. El guiño a Hetfield no es una casualidad; la influencia thrash es palpable en su técnica.
En la carretera, ha estado experimentando con un pedal MXR Rockman X100, modelado a partir del amplificador de auriculares creado por Tom Scholz (de Boston). «Solo tengo un delay digital y chorus, muy simple, pero Greg me ayudó a combinarlo con todo eso. Directamente, todos mis leads ahora suenan como Boston», confiesa Chavez. Esta elección es única en la escena, dándole a los solos de Drain una voz melosa e inesperada que se estrella de cabeza contra sus breakdowns brutales.
Cinco mosh parts que vuelven loco a cody chavez
Para entender mejor la impulsividad y el impacto sonoro de Drain, Chavez compartió cinco partes de ‘mosh’ que le hacen querer «causar algo de daño».
Leeway – unexpected (Born to expire, 1989)
«Realmente amo a Leeway por lo buena que es su composición y por tener ese sonido metalero mientras siguen siendo una banda de hardcore. Me identifico mucho con eso por lo que hacemos en Drain». Chavez destaca cómo la canción pasa de un riff melódico, casi glam, a un thrash directo, y luego al mosh part esencial. «No me importa quién seas, esa parte del pogo —creo que es solo 3-2-1-open— ¿cómo podrías no empezar a bailar con eso?».
Dark angel – psychosexuality (Time does not heal, 1991)
Dark Angel es considerada por algunos como una banda de thrash puro y por otros como death-thrash temprano. «Sammy también es un gran fan de ese disco. Siento que lo escuchamos mucho para California Cursed. Psychosexuality entra en el breakdown y piensas: ‘¡Mierda!’… Es un tema de metal increíble con una parte para pogo».
No warning – over my shoulder (Ill blood, 2002)
«La parte de pogo al final es increíble… Es solo: parte rápida, boom, directo a una parte de mosh. Es un riff tan simple, pero es tan efectivo y contundente». Chavez rinde homenaje a Jordan Posner, guitarrista de No Warning y Terror, a quien considera una de las mentes maestras detrás de estos riffs.
Kreator – betrayer (Extreme aggression, 1989)
Aunque Kreator no es una banda con la que típicamente harías ‘hardcore dance’, Chavez señala que el breakdown en Betrayer suena como si pudiera estar en una canción de hardcore. «Los riffs son jodidamente increíbles. Cuando me uní a Drain y comencé a escribir música nueva, pensé: ‘Joder, quiero hacer eso por mi cuenta'». También menciona la influencia de Sepultura, específicamente Dead Embryonic Cells de Arise, como ejemplo de thrash con claras partes de pogo.
Ceremony – eraser making its way its only job (Still nothing moves you, 2008)
«Es simplemente tan primitivo. Me atrapa cada vez. Lo que distingue las partes de pogo de Ceremony de otras bandas de hardcore es que hay mucha emoción en ellas. A veces es la melodía. Es una experiencia diferente a una banda de hardcore pesado o algo más directo». Para Chavez, Ceremony siempre será su banda de hardcore favorita, y concluye con una mención honorífica a Crumbsuckers, destacando Jimmie’s Dream de su segundo álbum, Beast on My Back, por sus riffs y su parte de pogo. Drain está listo para llevar esa mezcla explosiva y emocional al escenario con …Is Your Friend, un disco que promete ser caos puro de principio a fin.
Visto en: www.guitar.com

