Matt Heafy, el carismático líder y vocalista de la banda de metal Trivium, ha alzado la voz para compartir una experiencia profundamente personal que resuena con la vida moderna: la lucha contra el agotamiento extremo y los desafíos de salud mental. Conocido por su incesante actividad, no solo en la música sino también como padre y figura prominente en plataformas como Twitch, Heafy reveló que en 2024 llegó a malabarismos hasta 30 proyectos simultáneos.
Este torbellino de actividad alcanzó un punto de quiebre, llevándolo a buscar ayuda profesional. Su reciente EP, Struck Dead, lanzado en octubre por Trivium, no es solo una colección de canciones, sino un manifiesto musical que documenta su confrontación directa con su propia mente.
La intervención necesaria y el diagnóstico
El ritmo de vida de Heafy era insostenible. En una entrevista con Guitar.com, detalló la magnitud de su compromiso, destacando que su necesidad de mantener ocupada su mente lo llevó a saturarse profesionalmente:
«[El año pasado] estaba haciendo de 15 a 20 a 30 proyectos al mismo tiempo. Estaba produciendo bandas, estaba manejando bandas; estaba haciendo todos estos diferentes productos y probando todas estas cosas diferentes, como musicalizar videojuegos y musicalizar una película y comenzar un restaurante pop-up.»
La presión implacable finalmente cobró factura, culminando en una intervención por parte de sus compañeros de banda y seres queridos. Este fue el catalizador para que Heafy iniciara un camino hacia la recuperación, que incluyó terapia y Terapia Cognitivo-Conductual (TCC). La TCC es un enfoque estructurado que ayuda a las personas a identificar y cambiar patrones de pensamiento destructivos, esencial para abordar las raíces de su ansiedad y sobrecarga.
A través de la terapia, se reveló una imagen clara de su neuroquímica y condición mental. Heafy explicó que su bajo nivel de serotonina requería el uso de Inhibidores Selectivos de la Recaptación de Serotonina (ISRS) para corregir el desequilibrio. Una vez estabilizado, los terapeutas pudieron identificar las condiciones subyacentes que impulsaban su necesidad extrema de mantenerse ocupado: TDAH (Trastorno por Déficit de Atención con Hiperactividad), ansiedad intensa y TOC (Trastorno Obsesivo-Compulsivo).
Entender este diagnóstico fue fundamental. Como él mismo señala, buscaba desesperadamente descifrar: «¿Qué me hace funcionar? ¿Por qué pienso de esta manera? ¿Cómo puedo dejar de llegar a un punto tan extremo cada vez?». Esta autoconciencia marcó el inicio de una nueva perspectiva, no solo sobre su salud mental sino sobre cómo maneja su vida creativa y personal. El hecho de que una figura pública en el heavy metal hable abiertamente sobre el uso de ISRS y el diagnóstico de TDAH es un paso importante hacia la desestigmatización de estas condiciones en la industria musical.
El peso de las expectativas en el metal
La historia de Matt Heafy es un reflejo de la presión que muchos creativos, especialmente en la industria musical, sienten para monetizar cada aspecto de su vida. En la era digital, la expectativa de «estar siempre encendido» —hacer música, girar, manejar redes sociales, transmitir en vivo (Twitch)— convierte la carrera artística en un ciclo agotador de rendimiento constante. El TDAH, caracterizado por la dificultad para regular la atención y una tendencia al «hiperfocus» en proyectos de interés, puede exacerbar el burnout, impulsando a individuos como Heafy a asumir cargas masivas de trabajo hasta el colapso físico y mental.
El metal, como género, a menudo celebra la intensidad y la resiliencia, lo que puede dificultar que los músicos admitan vulnerabilidad. Que una figura tan prominente como Heafy comparta su batalla abiertamente es un paso crucial hacia la normalización del cuidado mental en la comunidad del metal.
Six walls: el himno de la liberación
El nuevo EP de Trivium, Struck Dead, contiene la canción Six Walls, una pieza musical que encapsula la brutalidad y la verdad de su experiencia. La letra y la intensidad de la pista reflejan el pozo oscuro en el que se encontró, un sentimiento que Heafy describe con una metáfora escalofriante:
“Me enterré en mi propio ataúd, y las seis paredes de este ataúd de madera son lo que me imaginé. Finalmente estoy tratando de liberarme.”
Esta lucha no fue instantánea; requirió tiempo y esfuerzo terapéutico. Le tomó aproximadamente un año empezar a «volver en sí», siendo enero [2025] el punto de inflexión. El impacto del tratamiento fue evidente en la primera gira que realizó después de los 38 o 39 años de vivir de la misma manera autodestructiva.
Su testimonio sobre esa primera gira post-tratamiento es conmovedor: «¡Mierda! ¡Me lo estoy pasando muy bien!», exclamó. Esta simple declaración subraya la diferencia abismal entre funcionar bajo el peso de la enfermedad mental no diagnosticada y experimentar la vida con una mente más sana y equilibrada.
Una nueva perspectiva profesional
Aunque Matt Heafy sigue siendo una persona súper ocupada —equilibrando la escritura del undécimo álbum de Trivium con su paternidad y sus transmisiones en Twitch—, su enfoque ha cambiado drásticamente. Ahora prioriza la gestión de su salud mental y está trabajando activamente para reducir su carga de proyectos. La lección principal de su historia es la importancia de la autoconciencia y la valentía para buscar ayuda, demostrando que la verdadera fortaleza reside en la vulnerabilidad y el compromiso con el bienestar. Su experiencia demuestra que la salud mental es una prioridad, incluso para aquellos que parecen incansablemente productivos.
Visto en: www.guitar.com

