La leyenda del rock y bajista de KISS, Gene Simmons, ha protagonizado un susto en la tranquila costa de Malibú. El martes por la tarde, Simmons fue hospitalizado brevemente después de estrellar su vehículo contra un coche estacionado en la famosa Pacific Coast Highway (PCH).
Afortunadamente, el incidente no pasó a mayores, pero generó preocupación entre sus seguidores, especialmente porque el propio Simmons informó a los agentes de policía que lo atendieron que había sufrido un desmayo o síncope mientras conducía. Según reportes de NBC 4 Los Ángeles, un portavoz policial describió cómo el coche del artista de 74 años se descontroló, dando un volantazo y «careened across several lanes of traffic» (se desvió a través de varios carriles de tráfico) antes de impactar contra el otro vehículo.
Un susto en la pacific coast highway
La Pacific Coast Highway (PCH) es conocida tanto por sus vistas espectaculares como por ser una carretera que requiere la máxima atención. Que un vehículo se desvíe a lo largo de varios carriles en esta concurrida vía es un escenario de alto riesgo, lo que subraya la gravedad potencial del incidente. La rápida respuesta de los servicios de emergencia y la suerte de que el impacto final fuera contra un vehículo aparcado ayudaron a prevenir una tragedia mayor.
Este incidente es un recordatorio de que, incluso las figuras más robustas del rock and roll, están sujetas a problemas de salud inesperados. Simmons, conocido por llevar una vida disciplinada, libre de drogas y alcohol y con un régimen estricto de ejercicio, se ha mantenido generalmente en una forma física envidiable a lo largo de las décadas. Sin embargo, su cuerpo parece haberle dado un aviso.
El diagnóstico: deshidratación y medicación
La preocupación se disipó rápidamente gracias a las declaraciones de su esposa, Shannon Tweed, quien confirmó que Simmons ya se estaba recuperando en casa. Tweed proporcionó detalles cruciales sobre la causa del desmayo, señalando que los médicos le habían cambiado recientemente la medicación.
Además, la deshidratación fue un factor determinante. Shannon Tweed comentó que al «Dios del Trueno» (apelativo de Simmons), se le había ordenado beber más agua, una indicación que, según su esposa, Simmons ha estado ignorando a pesar de la necesidad. La deshidratación, especialmente cuando se combina con cambios en la medicación, puede provocar mareos, desmayos y una drástica bajada de la presión arterial, siendo una causa común de incidentes automovilísticos de este tipo. Tweed enfatizó que su esposo ya se encontraba bien, simplemente agotado por el incidente.
El propio Simmons se encargó de tranquilizar al público, dejando un mensaje de voz a la cadena NBC 4 asegurando que estaba «doing fine» (bien).
Un guerrero del rock con agenda apretada
El accidente ocurre en un momento clave para KISS. Aunque la banda culminó oficialmente su gira de despedida, el End of Road, en diciembre de 2023, con un controvertido espectáculo en Nueva York que incluyó avatares digitales, la actividad de los miembros fundadores no ha cesado. La banda tiene programada una aparición conjunta en el próximo Kiss Kruise: Land Locked in Vegas, que tendrá lugar del 14 al 16 de noviembre en los Virgin Hotels de Las Vegas.
En este evento, KISS realizará espectáculos separados, tanto eléctricos como acústicos y sin maquillaje, marcando la primera vez que la formación se presenta en un escenario desde el que se suponía era el concierto final de su carrera. Esta exigente agenda subraya la importancia de la salud de Simmons para los compromisos futuros de la banda y el ecosistema del rock and roll.
Las olas de mala salud en kiss
Llama la atención que este incidente de salud de Gene Simmons se produzca apenas un día después de que su excompañero de banda, Ace Frehley, anunciara la cancelación de todas las fechas restantes de su gira de 2025. Frehley, el guitarrista principal original de KISS, citó «ongoing medical issues» (problemas médicos en curso) no especificados como la razón de su decisión.
A finales de septiembre, Frehley ya había cancelado un concierto tras experimentar «a minor fall» (una caída menor) en su estudio de grabación casero y necesitar hospitalización. Estos dos eventos cercanos en el tiempo, que afectan a dos de los miembros fundadores más icónicos de KISS, ponen de relieve los desafíos que enfrentan estas leyendas del rock a medida que envejecen, y cómo la salud se convierte en una prioridad ineludible, incluso para aquellos que parecen invencibles sobre el escenario.
Desde Adrifersa.com, deseamos una pronta y completa recuperación tanto a Gene Simmons como a Ace Frehley, esperando verlos pronto de vuelta a su mejor forma.
Visto en: ultimateclassicrock.com