El legendario guitarrista de Black Sabbath, Tony Iommi, ha compartido su entusiasmo por el uso de los amplificadores digitales, destacando especialmente su experiencia con el Kemper Profiler durante la grabación de su reciente sencillo, “Deified”. Iommi ha destacado que fue su productor, Mike Exeter, quien le introdujo a este equipo, y desde entonces ha quedado impresionado por su versatilidad y calidad de sonido. Según Iommi, la capacidad del Kemper para capturar y mejorar el tono de su amplificador Laney ha demostrado ser de un valor incalculable en el estudio.
En una reciente entrevista con Guitar World, Iommi explicó que en su estudio utilizó principalmente su guitarra Jaydee o su Gibson SG a través del Kemper Profiler. El guitarrista enfatizó lo práctico que resulta trabajar con este equipo, ya que permite eliminar la necesidad de microfonear todos los altavoces, ofreciendo la comodidad de tenerlo junto a uno en la sala de control. Según Iommi, la calidad del sonido es tan buena que “puede ser bastante difícil notar la diferencia entre el Kemper y un amplificador real”.
A pesar de su aprecio por los avances tecnológicos, Iommi sigue disfrutando de la experiencia de tocar en una sala con un cabezal y un gabinete, valorando el “rebote” que proporcionan los altavoces. Sin embargo, reconoce que, en cuanto a nuevos equipos, el Kemper ha funcionado muy bien para él en el estudio. Tony Iommi no es el único músico que se ha dejado seducir por los amplificadores digitales. Otros artistas como Jim Root de Slipknot y Chris Shiflett de Foo Fighters también han adoptado esta tecnología para sus presentaciones en vivo, mostrando una tendencia creciente hacia el uso de estos dispositivos en la industria musical.
Visto en: Guitar.com